viernes, febrero 11, 2005
jueves, febrero 10, 2005
Huelga de alumnos.
Saint-Flour, Francia. Jueves, 9 de febrero de 2005, 2:09 P.M. Estoy en la sala de profesores. Normalmente, a las tres empiezo a dar tres horas de clases. Pero hoy es un dîa especial. Los alumnos estân en huelga. Sî, los alumnos estân en "huelga". Hace dos semanas fueron los profesores, ahora tocô el turno a los estudiantes. La razôn principal es que el gobierno planea desaparecer el baccalauréat. Êste es un examen de tipo nacional que se aplica a los estudiantes al terminar el liceo (corresponde a la preparatoria en México). El gobierno planea que sea ûnicamente el establecimiento escolar el que determine si el alumno ha acreditado su formaciôn media superior. Es decir, que las cosas sean como pasan en México que al terminar tu escuela obtienes tu certificado y con ese mismo documento acreditas que has finalizado satisfactoriamente tus estudios y no a través de un examen nacional, organizado por el Ministerio de Educaciôn, como hasta ahora venîa pasando en Francia, examen con el cual intentas ingresar a la universidad o acreditas tu formaciôn para integrarte al mundo laboral. La medida parece corresponder con la tendencia de que el Estado (es decir, el gobierno central, porque es una repûblica centralista, no federal) se deshaga de muchas de sus actuales facultades y se las ceda a las regiones (equivalentes a las entidades federativas para México, pero con mucha menos autonomîa).
Los alumnos franceses en su mayorîa no estân de acuerdo con la implantaciôn de este sistema, puesto que a su parecer generarâ muchas desigualdades, sobre todo regionales. O sea, que se empezarâ a apreciar a los alumnos en funciôn de las escuelas de las que provengan y no de sus méritos propios, evaluados con los mismos criterios. El bac, como llaman a este examen nacional, tenîa la peculiaridad de ser el mismo para todos los estudiantes y se mantenîa anônima la identidad del que lo presentaba, por lo cual, las personas que lo calificaban no sabîan a quién estaban evaluando. Dicha prueba, consideran los manifestantes, parte de un criterio de igualdad nacional en la que los estudiantes obtienen determinada calificaciôn (que los hace candidatos o no a las escuelas mâs importantes), sin importar de qué establecimiento escolar o de qué regiôn procedan, evaluândose uniformemente los conocimientos adquiridos por los estudiantes de todo el paîs.
Hay que aclarar que el sistema educativo francés, por mâs que se plantea como un requisito indispensable la igualdad en la educaciôn de los alumnos, cuenta con un sistema elitista de educaciôn para la formaciôn de sus cuadros superiores, tanto de gobierno como empresariales. Lo anterior, a través de las "Grandes Escuelas", que son instituciones de educaciôn superior en las que se forman a las élites gubernamentales, cientîficas o empresariales. Para acceder a las Grandes Escuelas es necesario hacer clases preparatorias en los "Grandes Liceos", que son las preparatorias mâs prestigiosas y a las cuales no es fâcil entrar. Hay familias acaudaladas que compran propiedades inmobiliarias cerca de estos establecimientos para que sus hijos puedan entrar en ellos por corresponder a su circunscripciôn, lujo que estâ por demâs decirlo no se pueden dar los integrantes de las clases medias y, mucho menos, los de las clases bajas. Ademâs, de los establecimientos de prestigio, estân las diferencias regionales. Las regiones en Francia, como mencioné al principio del primer pârrafo, corresponden a las divisiones geopolîticas que en otros paîses se llaman provinicias (Argentina) o estados (México o EE.UU.). Inclusive en el mundo desarrollado, hay regiones que se encuentran en un nivel de atraso considerable con relaciôn a otras. Por ejemplo, en Francia, las regiones de Ile-de-France (Parîs), Rhône-Alpes (Lyon) o Provence-Alpes-Côte-de-Azur (Marsella y Niza) son las regiones con mayor movimiento econômico e industrial, generadoras de mucho mâs riqueza que otras partes del paîs. Por otro lado, las regiones centrales y tradicionalmente campesinas (i.e. Limousin o Auvergne, que es donde yo me encuentro)van algunos años atrâs en el desarrollo econômico e, inclusive, social que han alcanzado otros rincones de Francia. Esa desigualdad ha marcado también a nivel educativo diferencias entre los alumnos. Finalmente, hay que agregar las diferencias de clase, sobre todo por la gran cantidad de migrantes ârabes y del norte de Âfrica que no han logrado integrarse y viven en âreas perfectamente delimitadas de las grandes ciudades y que asisten a las mismas escuelas, consideradas muchas veces problemâticas y de muy bajo nivel académico. Por todas las diferencias anteriores se considera que la eliminaciôn del bac, serâ un factor determinante para que los alumnos egresados del liceo lleven la etiqueta que les dé su ubicaciôn geogrâfica o socioeconômica, independientemente de sus aptitudes o méritos personales, lo que contribuirâ a su discriminaciôn académica o laboral.
La principal razôn del gobierno para cambiar este sistema de evaluaciôn es que éste resulta enormemente caro y las autoridades francesas estân en una carrera muy fuerte por reducir los gastos pûblicos, debido a que ya van varios años que sobrepasan el déficit mâximo que establece la Uniôn Europea, para sus paîses miembros. Este cambio, junto con otros que llevan la misma lînea estân creando una gran movilizaciôn e inconformidad en la sociedad francesa que ve amenazados los principios de "Fraternidad, Igualdad y Libertad", en aras de lograr un crecimiento econômico para el paîs, cosa que el gobierno de Jacques Chirac (derecha polîtica y econômica) no ha logrado llevar a cabo.
Hay muchas cosas que pueden decirse con este respecto; no hay negros y blancos en estos problemas sino una escala de grises a veces muy confusa. Sin embargo, considero altamente meritorio que aûn los alumnos de liceo hayan salido a las calles a hacer manifiesto su descontento con estas medidas y expresarlo con razones y argumentos. Obviamente, hay que exceptuar a todos esos alumnos oportunistas que sin reflexionar gran cosa sobre el tema se han unido a la "huelga" con el ûnico fin de saltarse una tarde de clases. Sin entrar en el fondo del asunto, me atrae mucho la idea de una sociedad que discuta todas las medidas que le afectan y que actûe en consecuencia. Finalmente eso es la democracia moderna. Iniciar desde temprana edad con esa actitud sistemâtica, participativa y responsable serîa un gran motor de cambio para las sociedades latinoamericanas, que han permanecido muchas veces demasiado pasivas y, que se han granjeado con esa actitud gobiernos execrables y medidas evidentemente nocivas para todos los afectados, sin atreverse siquiera a manifestar pûblica y enérgicamente su descontento.
Los alumnos franceses en su mayorîa no estân de acuerdo con la implantaciôn de este sistema, puesto que a su parecer generarâ muchas desigualdades, sobre todo regionales. O sea, que se empezarâ a apreciar a los alumnos en funciôn de las escuelas de las que provengan y no de sus méritos propios, evaluados con los mismos criterios. El bac, como llaman a este examen nacional, tenîa la peculiaridad de ser el mismo para todos los estudiantes y se mantenîa anônima la identidad del que lo presentaba, por lo cual, las personas que lo calificaban no sabîan a quién estaban evaluando. Dicha prueba, consideran los manifestantes, parte de un criterio de igualdad nacional en la que los estudiantes obtienen determinada calificaciôn (que los hace candidatos o no a las escuelas mâs importantes), sin importar de qué establecimiento escolar o de qué regiôn procedan, evaluândose uniformemente los conocimientos adquiridos por los estudiantes de todo el paîs.
Hay que aclarar que el sistema educativo francés, por mâs que se plantea como un requisito indispensable la igualdad en la educaciôn de los alumnos, cuenta con un sistema elitista de educaciôn para la formaciôn de sus cuadros superiores, tanto de gobierno como empresariales. Lo anterior, a través de las "Grandes Escuelas", que son instituciones de educaciôn superior en las que se forman a las élites gubernamentales, cientîficas o empresariales. Para acceder a las Grandes Escuelas es necesario hacer clases preparatorias en los "Grandes Liceos", que son las preparatorias mâs prestigiosas y a las cuales no es fâcil entrar. Hay familias acaudaladas que compran propiedades inmobiliarias cerca de estos establecimientos para que sus hijos puedan entrar en ellos por corresponder a su circunscripciôn, lujo que estâ por demâs decirlo no se pueden dar los integrantes de las clases medias y, mucho menos, los de las clases bajas. Ademâs, de los establecimientos de prestigio, estân las diferencias regionales. Las regiones en Francia, como mencioné al principio del primer pârrafo, corresponden a las divisiones geopolîticas que en otros paîses se llaman provinicias (Argentina) o estados (México o EE.UU.). Inclusive en el mundo desarrollado, hay regiones que se encuentran en un nivel de atraso considerable con relaciôn a otras. Por ejemplo, en Francia, las regiones de Ile-de-France (Parîs), Rhône-Alpes (Lyon) o Provence-Alpes-Côte-de-Azur (Marsella y Niza) son las regiones con mayor movimiento econômico e industrial, generadoras de mucho mâs riqueza que otras partes del paîs. Por otro lado, las regiones centrales y tradicionalmente campesinas (i.e. Limousin o Auvergne, que es donde yo me encuentro)van algunos años atrâs en el desarrollo econômico e, inclusive, social que han alcanzado otros rincones de Francia. Esa desigualdad ha marcado también a nivel educativo diferencias entre los alumnos. Finalmente, hay que agregar las diferencias de clase, sobre todo por la gran cantidad de migrantes ârabes y del norte de Âfrica que no han logrado integrarse y viven en âreas perfectamente delimitadas de las grandes ciudades y que asisten a las mismas escuelas, consideradas muchas veces problemâticas y de muy bajo nivel académico. Por todas las diferencias anteriores se considera que la eliminaciôn del bac, serâ un factor determinante para que los alumnos egresados del liceo lleven la etiqueta que les dé su ubicaciôn geogrâfica o socioeconômica, independientemente de sus aptitudes o méritos personales, lo que contribuirâ a su discriminaciôn académica o laboral.
La principal razôn del gobierno para cambiar este sistema de evaluaciôn es que éste resulta enormemente caro y las autoridades francesas estân en una carrera muy fuerte por reducir los gastos pûblicos, debido a que ya van varios años que sobrepasan el déficit mâximo que establece la Uniôn Europea, para sus paîses miembros. Este cambio, junto con otros que llevan la misma lînea estân creando una gran movilizaciôn e inconformidad en la sociedad francesa que ve amenazados los principios de "Fraternidad, Igualdad y Libertad", en aras de lograr un crecimiento econômico para el paîs, cosa que el gobierno de Jacques Chirac (derecha polîtica y econômica) no ha logrado llevar a cabo.
Hay muchas cosas que pueden decirse con este respecto; no hay negros y blancos en estos problemas sino una escala de grises a veces muy confusa. Sin embargo, considero altamente meritorio que aûn los alumnos de liceo hayan salido a las calles a hacer manifiesto su descontento con estas medidas y expresarlo con razones y argumentos. Obviamente, hay que exceptuar a todos esos alumnos oportunistas que sin reflexionar gran cosa sobre el tema se han unido a la "huelga" con el ûnico fin de saltarse una tarde de clases. Sin entrar en el fondo del asunto, me atrae mucho la idea de una sociedad que discuta todas las medidas que le afectan y que actûe en consecuencia. Finalmente eso es la democracia moderna. Iniciar desde temprana edad con esa actitud sistemâtica, participativa y responsable serîa un gran motor de cambio para las sociedades latinoamericanas, que han permanecido muchas veces demasiado pasivas y, que se han granjeado con esa actitud gobiernos execrables y medidas evidentemente nocivas para todos los afectados, sin atreverse siquiera a manifestar pûblica y enérgicamente su descontento.
jueves, febrero 03, 2005
El feo.
Hola estimado Internet, sé que puedo confesarte esto sin problemas. Me han dicho que eres discreto. Me llamo Jerônimo Suârez y tengo 37 años. Yo no me siento muy muy feo. Bueno, la verdad, sî me acomplejô mucho que en la escuela me dijeran que mi madre en vez de darme pecho, me dio la espalda y chistes como esos. Pero he visto gente mâs fea que yo. Lo que sî debo reconocer es que mi nariz queda perfectamente representada con esa frase, creo que es de Quevedo, que dice: "érase un hombre a una nariz pegado". Pero el tamaño de mi nariz poco importaría si no fuera por la berruga. No es enorme pero sî alcanza la talla de un buen garbanzo. Lo que me consuela es que tiene un bonito color como entre morado y café. Es que he visto unas que son de un carmesî que llama demasiado la atención. La mîa no es tan llamativa, aunque lo fuera menos si no estuviera justo en la punta de la nariz. Al principio me molestaba que la gente en vez de verme a los ojos, tuviera fija su vista en ella, pero ya entendî que es algo que no se puede evitar cuando estuve en frente de una chica que tenîa una justo en la comisura de los labios. Por empatîa decidî no vérsela, pero me era imposible no voltear la mirada. Mis ojos no obedecîan a mi cerebro y eran atraîdos como por imanes a verle la comisura de los labios, o mejor dicho la cosa que estaba en ella. Ademâs, le debo lo de mi ojo visco a mi berruga, seguro por estar siempre viéndola se quedô definitivamente asî. Mi boca no estâ tan mal, hasta me eleva la vanidad. La joroba, esa sî es reciente. También se la atribuyo al peso de la berruga que fue doblando paulatinamente mi columna vertebral. Pero me han dicho que exagero. Mis orejas ya ni las describo porque tampoco estoy muy contento con ellas y fueron objeto de muchas burlas durante toda mi infancia y adolescencia: que si parecîa volkswagen con las puertas abiertas o que si captaba las ondas extraterrestres. Mis "amigos" no me dejaban en paz. No sé porque usé la palabra prohibida. La verdad es que no tengo amigos, nunca los tuve. No sé a qué atribuir ese hecho. Creo que culpar a la berruga serîa demasiado. Pero bendigo a Internet porque cuando se crearon los "chats" y luego ISQ, fui feliz. Hasta que llegô la webcam, maldita sea! "Una imagen vale mâs que cien palabras", me deben haber dicho esa frase como treinta veces. Si tan solo supieran que mi imagen no vale mâs que para un buen susto. Sôlo una vez tuve la desgraciada ocurrencia de enviar una foto. Ese episodio no se lo platico ni a mi psiquiatra. En fin, no me interesaba tanto la conquista.El otro dîa se me ocurriô una idea que creo que puede ser genial. Si hay bares gays, por ejemplo, porqué no hacer un bar para feos. Podrîa conservarse la palabra en inglés, asî se oirîa menos peyorativo. Ya hasta hay un Coyote Ugly. Bueno, pues algo asî, pero todo lo contrario, que sea como Gente Ugly. Es que la gente bonita me incomoda. Son ellos los que en realidad me han hechoinseguro. Si un lugar se vaciara de gente bonita, me parece que me sentirîa muy bien. Y creo que serîa muy prâctico que todos los que como yo, que en un bar normal no atrapamos ni una mosca, nos pudiéramos reunir en un ambiente agradable, pero solamente feos, que en la entrada se dijera "se reserva la admisiôn" y que el criterio fuera ser feo. Lo que no sé es si al buscar tu ligue, te procurarîas a la mâs fea o a la fea menos extrema. Eso habrîa que investigarlo, pero poco importa. Hasta podrîamos organizar un concurso de la mâs fea, para enseñarle al mundo que también puede ser orgullo ser feo. Porque estâ tan menospreciada la fealdad que la verdad el mundo deberîa de cambiar. Y de la convivencia de los que como yo no fuimos precisamente premiados por la naturaleza, seguro surgirîa un espîritu de fraternidad y crearîamos organizaciones pro derechos de los feos. Sî, y tendrîamos nuestro Ugly Pride y despuês si todo marcha bien un Ugly Parade.
¿Cômo no se me habîa ocurrido antes? Ahora sôlo debo pedir un crédito al banco o algo asî para procurarme fondos. Y localizar una ciudad con muchos feos. Bueno, no he viajado mucho pero en cualquier ciudad grande debe haber bastantes. En cuanto al vecindario, obviamente, debe estar en las antîpodas de los lugares chic o nice o in o todos esos extranjerimos que usan para discriminarnos. No lo habîa pensado, pero segûn las estadîsticas los feos no obtenemos fâcilmente un crédito. Pero creo que en el banco les parecerâ tan buena mi idea como me lo parece a mî. Aunque sobre todo los bancos militan en el lado enemigo. Siempre con sus cajeras muy arregladitas y bonitas. Ay! "Se requiere excelente presentaciôn", cuânto tiempo de mi vida vivî engañado al buscar trabajo y leer eso en los clasificados, pensando que se referîa a llevar los zapatos bien pulidos, la ropa planchada y los cabellos peinados. Hasta que de plano en una oficina una harpîa me dijo por lo claro que requerîan a alguien de "excelente presentaciôn", con un énfasis y un sarcasmo evidente mientras al mismo tiempo me recorrîa con su vista de arriba a abajo con un gesto de desaprobaciôn, agregando al final: "alguien guapo, señor". Y el puesto no era para modelo, aclaro, era para archivista, que segûn tenîa entendido era un trabajo que convenîa mâs a mi condiciôn.
De cualquier manera, tengo esperanzas de montar ese bar. Sé que lo haré, aunque sea en los prôximos años. Serîa lo ûnico que he montado en toda mi vida, para ser sincero. Y cuando tenga dinero me haré operar la berruga. Pero creo que no serâ conveniente para mi imagen de empresario del sector de los feos. En fin, mejor me la dejaré y moriré feo pero feliz.
¿Cômo no se me habîa ocurrido antes? Ahora sôlo debo pedir un crédito al banco o algo asî para procurarme fondos. Y localizar una ciudad con muchos feos. Bueno, no he viajado mucho pero en cualquier ciudad grande debe haber bastantes. En cuanto al vecindario, obviamente, debe estar en las antîpodas de los lugares chic o nice o in o todos esos extranjerimos que usan para discriminarnos. No lo habîa pensado, pero segûn las estadîsticas los feos no obtenemos fâcilmente un crédito. Pero creo que en el banco les parecerâ tan buena mi idea como me lo parece a mî. Aunque sobre todo los bancos militan en el lado enemigo. Siempre con sus cajeras muy arregladitas y bonitas. Ay! "Se requiere excelente presentaciôn", cuânto tiempo de mi vida vivî engañado al buscar trabajo y leer eso en los clasificados, pensando que se referîa a llevar los zapatos bien pulidos, la ropa planchada y los cabellos peinados. Hasta que de plano en una oficina una harpîa me dijo por lo claro que requerîan a alguien de "excelente presentaciôn", con un énfasis y un sarcasmo evidente mientras al mismo tiempo me recorrîa con su vista de arriba a abajo con un gesto de desaprobaciôn, agregando al final: "alguien guapo, señor". Y el puesto no era para modelo, aclaro, era para archivista, que segûn tenîa entendido era un trabajo que convenîa mâs a mi condiciôn.
De cualquier manera, tengo esperanzas de montar ese bar. Sé que lo haré, aunque sea en los prôximos años. Serîa lo ûnico que he montado en toda mi vida, para ser sincero. Y cuando tenga dinero me haré operar la berruga. Pero creo que no serâ conveniente para mi imagen de empresario del sector de los feos. En fin, mejor me la dejaré y moriré feo pero feliz.
Saint-Flour, cuando llegué.
Saint-Flour, nevado.
Montpellier
miércoles, febrero 02, 2005
Il faudra leur dire...
Si c'est vrai qu'il y a des gens qui s'aiment
si les enfants sont tous les mêmes.
Alors, il faudra leur dire.
C'est comme des parfums qu'on respire
juste un regard facile à faire,
un peu plus d'amour que d'ordinaire.
Puisqu'on vit dans la même lumière
même s'il y a des couleurs qu'ils préfèrent
Nous on voudrait leur dire
C'est comme des parfums qu'on respire
juste un regard facile à faire
un peu plus d'amour que d'ordinaire.
Juste un peu plus d'amour encore
pour moins de larmes,
pour moins de vide,
pour moins d'hiver.
Puisqu'on vit dans les creux d'un rêve
avant que leurs mains ne touchent nos lèvres
Nous on voudrait leur dire
les mots qu'on reçoit.
Facile à faire
Letra y música de Francis Cabrel.
Si es cierto que hay personas que se aman
si los niños son todos iguales,
entonces, habrîa que decirles.
Son como perfumes que respiramos,
sôlo una mirada;
fâcil de hacer,
un poco mâs amor que de costumbre.
Ya que vivimos en la misma luz
aunque haya quienes prefieran colores diferentes
nosotros quisiéramos decirles.
Son como perfumes que respiramos,
sôlo una mirada;
fâcil de hacer.
Un poco mâs amor que de costumbre.
Sôlo un poco mâs de amor aûn
por menos lâgrimas
por menos vacîo
por menos invierno.
Porque vivimos en el cauce de un sueño
antes que sus manos toquen nuestros labios
nosotros quisiéramos decirles
las palabras que recibimos.
Fâcil de hacer...
Traducción libre.
si les enfants sont tous les mêmes.
Alors, il faudra leur dire.
C'est comme des parfums qu'on respire
juste un regard facile à faire,
un peu plus d'amour que d'ordinaire.
Puisqu'on vit dans la même lumière
même s'il y a des couleurs qu'ils préfèrent
Nous on voudrait leur dire
C'est comme des parfums qu'on respire
juste un regard facile à faire
un peu plus d'amour que d'ordinaire.
Juste un peu plus d'amour encore
pour moins de larmes,
pour moins de vide,
pour moins d'hiver.
Puisqu'on vit dans les creux d'un rêve
avant que leurs mains ne touchent nos lèvres
Nous on voudrait leur dire
les mots qu'on reçoit.
Facile à faire
Letra y música de Francis Cabrel.
Si es cierto que hay personas que se aman
si los niños son todos iguales,
entonces, habrîa que decirles.
Son como perfumes que respiramos,
sôlo una mirada;
fâcil de hacer,
un poco mâs amor que de costumbre.
Ya que vivimos en la misma luz
aunque haya quienes prefieran colores diferentes
nosotros quisiéramos decirles.
Son como perfumes que respiramos,
sôlo una mirada;
fâcil de hacer.
Un poco mâs amor que de costumbre.
Sôlo un poco mâs de amor aûn
por menos lâgrimas
por menos vacîo
por menos invierno.
Porque vivimos en el cauce de un sueño
antes que sus manos toquen nuestros labios
nosotros quisiéramos decirles
las palabras que recibimos.
Fâcil de hacer...
Traducción libre.
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